Ahora descansas cual amapola en el agua, como la sirena de alma-que siempre fuiste- libre de las ataduras, de la cruel sepultura que damos los mortales para acallar a las almas monumentales como las tuyas, amada y loca enamorada, Alfonsina, susurran tu nombre en las tormentas marinas, mientras tu duermes sin que nada te despierte salvo el cruel y dulce llamado a tu puerta de corales oculta en los matorrales de tus memorias, que, siempre, a las 5 de la tarde, es encontrada por tu dulce nodriza la cual te lleva a beber té con hortalizas.
gracias a todos los que lean Alfonsina una grande!
1 comentario:
Fantastico!!! Gracias!!!
Quería desearte una feliz navidad y que siendo amigos en el 2009!
Abrazos y no bajes los brazos nunca.
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